Revista Casa Mediterráneo

Lyon-Madrid: Historia de dos librerías

on May 27, 2020

A fines de abril del año pasado me mudé de Madrid a Lyon por razones profesionales. Por aquel entonces estaba yo enfrascado en la escritura de un libro (una parodia de novela negra inspirada en ‘El Quijote’, titulada ‘Las aventuras del ingenioso detective Frank Stain’) que había comenzado a pergeñar en agosto de 2018. 

Juan López-Herrera

Yo había leído bastante novela negra antes de embarcarme en esta empresa, pero mis lecturas habían sido muy poco sistemáticas, con una reincidencia obstinada en los escritores que siempre me han gustado (Hammett, Chandler,  Simenon, Vázquez Montalbán, Juan Madrid, González Ledesma, Lorenzo Silva, Padura…) y lagunas que, más que tales, se asemejaban a pavorosos agujeros negros.

El proyecto de novela me obligaba a actualizar aceleradamente mis conocimientos sobre el género negro y a salir de la zona de confort de mis autores favoritos, tarea que no sabía muy bien cómo abordar en solitario.

Para mi fortuna, un buen día descubrí casi por azar que la magnífica librería de mi barrio (Polifemo, en el Parque de las Avenidas) cobijaba a un librero y a dos libreras (Ramón, Feli y Camino) que, por detrás de vitrinas y estanterías repletas de historia y alta literatura, tenían –especialmente en el caso del primero- un conocimiento enciclopédico y un punto clandestino de la novela negra, conocimiento que mis tres evangelistas compartieron generosamente conmigo hasta mi partida a Lyon.

Llegué a esta ciudad francesa con mi novela a medias y cierta zozobra por la pérdida de mi oráculo polifémico y polifónico madrileño. Yo sabía que Lyon es la sede del Quais du Polar, uno de los festivales de novela negra más prestigiosos del mundo, pero por lo demás la ciudad era para mí territorio ignoto.

La librería Un Petit Noir, en la margen izquierda de la calle Montée de la Grande-Côte

Desde mi llegada dediqué todos mis ratos libres a recorrer a pie el bellísimo corazón histórico de Lyon, un intrincado dédalo de calles y pasadizos (las famosas traboules) que se extiende entre dos ríos, el Saona y el Ródano, y dos colinas, Fourvière y la Croix-Rousse.

Y fue en uno de estos paseos, subiendo desde el centro a la Croix-Rousse por la empinada Montée de la Grande Côte, cuando me di de bruces con una pequeña y coqueta librería, con terraza hacia la calle y café en el interior, llamada Un Petit Noir. Intrigado por el nombre (al límite de la incorrección política en estos tiempos de indignación tan fácil como el gatillo de un vaquero de Marcial Lafuente Estefanía) entré y comprobé sorprendido que se trataba de una librería exclusivamente dedicada a la novela negra, una de las dos únicas en su género en Francia -junto a otra en Estrasburgo- según afirma con orgullo de aldea gala su propietario, Jean-Pierre Barrel.

Fachada de la librería Un Petit Noir

En éste encontré a mi nuevo guía espiritual para explorar el continente inabarcable de la novela negra y ya en mi primera visita adquirí la biblia del género, el Dictionnaire des littératures policières de Claude Masplède, que desde entonces ocupa lugar de honor en mi biblioteca, donde desdeña con insolencia juvenil las miradas altaneras de su aristocrática vecina, la Historia de la literatura universal, de Martín y Riquer. 

El 11 de mayo comenzó en Francia el desconfinamiento. El sábado siguiente salí de mañana desde mi casa hacia la Montée de la Grande Côte. Cuando me aproximaba a la esquina de la rue Neyret con la Montée tenía el corazón en un puño, pero al doblar la esquina vi que la puerta de Un Petit Noir estaba abierta y su propietario me recibió con mascarilla y una sonrisa de superviviente en los ojos.

Me acordé entonces de los tres libreros madrileños de Polifemo y deseé que tuvieran la misma suerte que su colega francés en estos tiempos de pandemia y desescaladas, que son otra vez (la Literatura con mayúsculas no tiene fecha de caducidad) “el mejor de los tiempos y el peor de los tiempos (…) la primavera de la esperanza y el invierno de la desesperación”.

mariagialma@gmail.comLyon-Madrid: Historia de dos librerías