Joakín López es un intérprete y compositor murciano que lleva la música en las venas. Su incipiente melomanía le hizo acercarse desde niño a diversos instrumentos, desde la guitarra española y eléctrica o la percusión hasta otros puramente tradicionales de Oriente, pasando por géneros tan diversos como el heavy metal, el rock o el flamenco hasta desembocar en músicas de países como Marruecos, Grecia, Turquía o India, lugares donde vivió durante varios años empapándose de su cultura. Pero si algo caracteriza a Joakín López es su especialidad en hang, un instrumento de reciente creación (fue obra de dos suizos en el año 2000), que con su variedad de timbres y peculiar sonido logra transportar a la audiencia a un profundo viaje interior. Pero no es el único instrumento poco convencional que maneja, también toca el rabab tradicional de Afganistán y la Lavta turca, cuyos sonidos consigue evocar tierras y tiempos lejanos.
Tras compartir enriquecedoras experiencias musicales con grandes intérpretes del mundo árabe, una vez de vuelta a España Joakín López emprendió un proyecto en solitario con su álbum ‘Agua’, que le llevó a tocar por diferentes puntos de la geografía española, solo y acompañado de otros músicos. La pandemia del Covid-19 produjo un parón en este recorrido, que ahora retoma. Además de reanudar este proyecto, Joakín López (hang) estrena trío junto a Montse Salma Vives (cello y oud) y Joaquín Sánchez (clarinete y ney) en un concierto organizado por Casa Mediterráneo que supone el debut de la formación sobre los escenarios. La actuación de Joakín López Trío tendrá lugar el viernes 2 de octubre a las 19 horas en la sede de Casa Mediterráneo, dentro del ciclo Música y el Mediterráneo. El evento es de acceso libre, pero requiere inscripción previa a través del correo electrónico comunicacion@casa-mediterraneo.es aportando nombre y apellidos, DNI y teléfono de contacto.
De forma previa al concierto, mantuvimos una entrevista telefónica con Joakín López para aproximarnos a una forma de hacer música que nos hace viajar a otros tiempos y lugares remotos y, al mismo tiempo, nos lleva al propio interior.

Joakín López – © Foto: Aurora Valverde
Su acercamiento a la música comenzó desde una edad muy temprana, experimentando con diferentes estilos musicales e instrumentos. ¿Cómo fue esa aproximación y su evolución en el mundo de la música?
Desde niño recuerdo que mi hermano mayor, Antonio, estaba escuchando sus cintas de heavy metal y digamos que ahí fue cuando yo empecé a sentir el latido bien fuerte, siendo un chavalín. Enseguida apareció una guitarra española de mi tía, que heredé, y empecé a tocarla. Luego ya salté a la guitarra eléctrica; con distorsión hacíamos heavy metal, rock potente. Fueron pasando los años y llegó un momento en el que el rock quedó un poco de lado, la guitarra la colgué y empecé a tocar mucha percusión. En esa época hubo mucho mestizaje, estuve mucho tiempo muy flamenco, tocando con gitanos muy grandes de la zona. En ese espacio de tiempo, con 28 años salté a India y ahí se produjo un giro. Empecé a conocer otras músicas y a experimentar los sonidos de aquellas tierras. Viví durante mucho tiempo entre Turquía, Grecia, India, Marruecos… y entonces empecé a tocar instrumentos tradicionales de aquella zona.
¿Cuánto tiempo permaneció en esa parte del mundo y cómo fue el proceso de aprendizaje de esas músicas?
Estuve unos nueve años. La música llama a la música y al final nuestros intereses son los que nos mueven. Era una aventura personal y musical, todo de la mano, una unidad. Y claro, los músicos aparecen. Vas buscando y ellos te buscan a ti. Estamos conectados.
Toca instrumentos que no son nada convencionales o conocidos por estas tierras, como el hang. ¿Qué tiene este instrumento de particular?
El hang es algo muy curioso porque es un instrumento muy nuevo, que nace en el año 2000, con lo cual sólo tiene 20 años de vida, sigue siendo fresco y con el que mucha gente tiene la primera toma de contacto en su vida. Es un instrumento particular por su forma y por su sonido, muy loco, porque cuando lo escuchas desde atrás, sin verlo, suena como si fuera una banda y cuando le pones la mirada te das cuenta de que se trata de un único instrumento. Tiene un sonido muy acuático, muy de dentro, me parece. Un instrumento tan novedoso, tan fresco y tan actual casualmente lo toco con instrumentos que son todo lo contrario, tradicionales, de tierras tan singulares como Turquía, Afganistán, Irán…
Un instrumento tan contemporáneo como el hang que convive con otros antiguos que remiten a tierras y tiempos lejanos, ¿funciona bien?
Sí, es un instrumento sumamente versátil.
El concierto que tendrá lugar en Casa Mediterráneo correrá a cargo de un trío de reciente creación del que usted forma parte. ¿Quiénes son sus otros dos integrantes?
Nos estrenamos allí con vosotros. Va a ser la primera vez que esta formación actúe de cara al público. Son geniales. Montse Salma Vives es una cellista de Elche y lleva también muchísimos años tocando estos instrumentos con gente del mundo árabe y del flamenco. Para mí es una gran oportunidad participar con ella por primera vez en un mismo escenario. Y Joaquín Sánchez es un clarinetista principalmente, pero toca todo tipo de instrumentos de viento, es un maestro. Es de Almargen, Málaga, y su trayectoria en el mapa ha sido muy variada, ha estado por Turquía, Grecia… y hoy en día se encuentra en Madrid. Es un gran músico que está tocando a día de hoy con Jorge Pardo, con Rubem Dantas, con Javier Ruibal… está en la escena muy fuerte, así que para mí es todo un placer poder compartirla con él. Ya hemos hecho cosas juntos, de flamenco hace muchos años, pero los kilómetros nos separaron mucho y el viernes tendremos la oportunidad de juntarnos otra vez.
¿Qué repertorio van a interpretar en el concierto?
Básicamente son composiciones mías, luego también se va a interpretar un par de temas tradicionales de Turquía, Grecia y el mundo andalusí-mediterráneo-arabesque. Pero, principalmente, vamos a ofrecer composiciones propias originales, que con ese sonido tan particular del hang, que yo interpreto, a su vez unido al cello y el oud por parte de Montse y el clarinete y el ney de Joaquín, suenan realmente deliciosas. Es un Mediterráneo muy galáctico (risas).
En estos viajes que ha realizado por los países mediterráneos, ¿ha notado un nexo de unión entre esas culturas con la música española?
Estamos hermanados a todos los niveles, en el musical y en el de la sangre. Pienso que todos somos uno. Muchas cosas en India, en Rajastán, suenan a flamenco, a nuestra música. Y es muy curioso que conforme te vas alejando de tu tierra y vas haciendo kilómetros alejándote de tu lugar de origen todo va cambiando progresivamente, los rasgos faciales, la lengua… pero al final cuando llegas a la punta del Lejano Oriente te das cuenta de que esa raíz es la misma. Todo es lo mismo, con la particularidad de ese avance y esa evolución. Al final, estamos hermanados.
En este sentido, pese a las diferencias idiomáticas y de costumbres, ¿la música puede servirnos para entendernos, como un lenguaje universal?
Sí, totalmente de acuerdo. La música es arte, pienso que es la única religión que no hace distinción entre sexos, ni entre razas, ni entre fronteras. Creo que el arte en general es absolutamente para todos.
Para terminar, me gustaría saber en qué situación se encuentra su proyecto en solitario con el que va a presentar su nuevo disco ‘Agua’ por el territorio nacional.
Está ahora mismo en el horno. Salió por un tiempo, pero debido a las circunstancias que nos han tocado vivir se tuvo que meter en el congelador. Estaba en acción, pero se tuvo que parar. Por los mundos de allá y de acá he tenido la suerte de tocar con grandes músicos y lo que sucedió fue que a la vuelta del periplo del Medio Oriente hace dos años, en España empecé mi proyecto en solitario. Grabé el disco ‘Agua’, sólo con hang y empecé a moverlo actuando en varios lugares del país, casi siempre en solitario y otras veces acompañado de grandes músicos. Debido a la actual situación, todo esto tuvo que interrumpirse y ahora estamos súper ilusionados con lanzar otra vez el proyecto al mundo exterior.
¿El disco estará disponible el día del concierto?
Sí y te aseguro que el concierto llevará a los asistentes a algún lugar del mapa. Es un viaje, a la vez lejano e interior, que te sitúa ante un espejo muy cercano.
Más información sobre Joakín López, en su página de Facebook.
Fotografía destacada: Joakin Lopez – © Foto: Miguel Moreno